Fue imposible resistirse
Una azotea con unas formidables vistas, un sillón cómodo, tiempo por delante y unas letras de contornos bien definidos, con una estructura portante que estaba diciendo: “dibújame, te lo voy a poner muy fácil”.
Fue imposible resistirse. Comencé por medir una y otra vez hasta asegurarme que no le cortaría la cabeza al ciervo. De altura, desde el cuerno hasta la tarima, a lo ancho desde la pata hasta la pata de la L.
- Midiendo y punteando en el cuaderno
- La estructura nos ofrece una oportunidad para “colgar” nuestro dibujo
- Ciervo y letras (con la rectificada “O”)
- La terraza al pie
- Detalles de la chapa que sustenta las letras
- La acuarela comienza con un cielo continuo y las sombras del antepecho
- Y acabamos con detalles de color
Quedó este dibujo donde la tipografía es la protagonista:
Mientras tanto, Rosa cumplía con su compromiso en la Complutense, invitada a dar una clase y un workshop con alumnos del Máster de Gestión del Patrimonio. Hablando de patios.
Prefiero la ropa tendida. Hablando de torres
La conexión entre arquitectura y poder viene de lejos, hay ejemplos de ello desde la antigüedad más remota hasta nuestros días y es evidente que sin esta conexión, no hubiéramos disfrutado de la mayoría de las obras maestras de la arquitectura.